La mente puede controlar todo el cuerpo, incluso para hacernos
aliviar de un dolor o provocarlo.
El efecto placebo es un buen ejemplo de ello. Trata de una
práctica médica o componente que produce una sensación no por que tenga efecto
real, sino por la creencia que tiene el paciente de su efecto.
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| El efecto placebo en la mente |
Por ejemplo, en un estudio que se hizo en la Universidad de
Harvard se escogió a un grupo de pacientes que padecía dolor en las
articulaciones, se dividió al grupo en dos y al primero se le proporcionó unas
píldoras que aliviaban el dolor, y al otro grupo un tratamiento de acupuntura.
Al finalizar, algunos de los pacientes se quejaron de los efectos
secundarios que tenían los tratamientos. Los pacientes de las píldoras sufrían
de somnolencia, y la acupuntura les
producía una inflamación, e incluso dolores.
Esos eran los efectos secundarios
que se les dijo antes de comenzar el estudio a los pacientes, pero la mayoría
de pacientes mejoraron su dolor de articulaciones.
Lo sorprendente de este ‘experimento’ es que ninguno de los
pacientes fueron tratados, las píldoras no contenían ningún medicamento y las
agujas nunca profundizó en la piel.
Todo esto era producto de la mente, ese es el efecto placebo,
puedes dominar tu cuerpo si crees firmemente en ello, aliviar dolores sin tener
que tomar medicamentos ni acudir a terapias.
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